La fuerza de la identidad: Sobre «El canto de las mariposas»

por PM

Este país tiene grandes heridas, sin embargo, la mayor parte del tiempo hacemos como que no existen. Como un acto reflejo autodestructivo imaginamos ser una comunidad de hermanos, de iguales, donde aparentamos que todo está bien y que el «desarrollo» y el olvido se encargarán silenciosamente de componer las cosas. Pero esconder nuestros problemas bajo la alfombra solo genera enormes ollas de presión, que tarde o temprano nos pasan factura. Por eso más vale hablar de las cosas que están mal, hablar de esas heridas con valor y sentido de pertenencia.

El «Canto de las mariposas» (Núria Frigola, 2020) cuenta una historia de reafirmación y de reencuentro. Todo empieza a partir del bloqueo creativo del artista que, cansado de la repetición en sus pinturas, decide regresar a su casa, en Pebas (Loreto), y buscar en las enseñanzas de su abuela Martha la inspiración perdida; pero rápidamente nos adentramos en la historia de barbarie que vivió el pueblo uitoto y su larga resistencia. En ese ínterin destaca, junto a Rember, el otro personaje principal de esta historia, Martha López, quien está presente en todo el documental; no solo porque es citada constantemente, sino porque su voz aparece en pasajes clave en los cuales entendemos la importancia que tiene ella dentro de la familia Yahuarcani López.

Martha fue la gran maestra de Rember y aquí esta relación se nos cuenta de forma maravillosa. Ella tenía bien en claro quién era, qué es lo que había perdido tras la criminal expansión cauchera y lo que se podía perder sino cultivaba la memoria en los suyos. Martha es un ejemplo de resistencia para todos nosotros y, ciertamente, lo es para su familia, su clan (Garza blanca) y los uitoto. Sus palabras resuenan con dolor y tristeza, pero sobretodo con esperanza; tal como lo siguen haciendo algunos relatos que perviven tras la arremetida española allá por el siglo XVI.

Este es un documental en el cual se le ha dado a la oralidad un espacio preponderante. Así, relatos íntimos como el que sostienen Rember y su madre, u otros de carácter grupal como aquella escena en la cual un anciano rememora la masacre de sus antepasados, son ejemplos donde la palabra se presenta como el principal pilar de una identidad compartida. La herencia cultural de los uitoto se sostuvo en la oralidad, por ello Martha siempre lamentó la muerte de los ancianos porque ya nadie podía contar las leyendas y conocimientos de los uitoto. Ella sabía que el olvido y el silencio eran el fin de los suyos. Rember y su madre de un modo análogo son conscientes de que su tradición es frágil, pues se les complica recordar el nombre de las cosas en munuka (el idioma de los uitoto) porque no lo hablan en su día a día.

Hay también recursos visuales muy bien logrados, como las referencias fotográficas de la época del caucho; pero son, quizá, las imágenes más sobrecogedoras aquellas donde Rember visita la casa del nefasto cauchero Julio César Arana. Sitio que recuerda a otros museos y lugares de memoria del horror que existen alrededor del mundo, como lo es Auschwitz. Aunque la casa que visita Rember es, ironías de la vida, un internado de niños en lugar de un museo que cuente la barbarie que alojaron sus muros.

Es loable el trabajo de todos los que han hecho posible este documental, así como la paciente y constante presencia de Rember Yahuarcani en el medio cultural peruano, y no hablo solamente de su trabajo como artista, sino también por ser él una voz serena pero firme ante el olvido oficial que se pretende instaurar sobre la masacre de los pueblos amazónicos en la época del caucho, que ha sido uno de los eventos más horrendos y sanguinarios que ha vivido este país desde que es una república.

Sin embargo, al día de hoy siguen padeciendo el asedio y la incomprensión, pues los distintos pueblos de la Amazonía se ven acorralados por la depredadora cultura occidental que todo lo busca equiparar bajo su modo de vida, que no tiene igual respeto hacia la naturaleza como si lo tienen, por ejemplo, los uitoto. Además, muchos de ellos viven en constante amenaza, pues distintas actividades económicas atraen a gente sin escrúpulos que asesinan con total impunidad a quienes se oponen entre ellos y sus negocios. Creo que Rember está en una posición ventajosa que debería aprovechar para que estos temas se mantengan en el debate público, sé que este es su compromiso y esperamos que siga en esa línea; pues, él es, actualmente, uno de los pintores más importantes del Perú y un reconocido difusor de la cultura amazónica, reconocimientos conseguidos con perseverancia, fruto de su encomiable amor por su identidad, que es, quizá, el más importante de los mensajes que nos transmite.

Publicado el 08 de abril de 2022


Datos

«El canto de las mariposas» puede verse libremente hasta el 24 de abril en el siguiente enlace.